Rana y Ramzi, de Dubai, lo tuvieron claro desde el principio. Su romántica boda sólo podía tener lugar en Andalucía. Rodeado de olivos milenarios y campos sin límites, iluminado por la puesta de sol mediterránea.

La realidad es que todos tenemos ideas preconcebidas sobre lo que es Andalucía. No debemos confundir estas frases con tópicos. La verdadera esencia de Andalucía se encarna en un lugar como éste. Un impresionante cortijo en Jerez de la Frontera, rodeado de la belleza de la naturaleza y con hermosos patios, era el lugar ideal para reunirse con la familia y los amigos.

Rana y Ramzi nos deleitaron con una celebración natural e íntima, sin artificios. Para el banquete de bodas se dispusieron largas mesas en las que se sirvieron tapas y paella bajo luces de colores. Su actuación flamenca adicional hizo que fuera una experiencia increíble. La velada concluyó con una fantástica fiesta que duró hasta el amanecer.